top of page

La Mamografía

La mamografía consiste en una exploración diagnóstica con rayos X de la glándula mamaria, mediante aparatos denominados mamógrafos. Estos equipos disponen de tubos de emisión de rayos X especialmente adaptados para conseguir la mayor resolución posible en la visualización de las diferentes estructuras que componen la glándula mamaria. Pueden ser digitales o analógicas.

También existe un tipo de mamografia 3D (tomosintesis) que adquiere imágenes mientras el tubo de rayos gira. Esto provoca una reconstrucción tridimensional aproximada de la mama, pudiendo distinguir lesiones superpuestas que en una mamografía convencional podrían no distinguirse correctamente, y en algunos casos ofrece imágenes más claras.

La manera adecuada de presentarse a este examen es recién bañada, sin desodorante ni crema, con ropa de dos piezas.

Se necesita 4 radiografías básicas para la evaluación del tejido (dos por cada mama).

El personal médico que te la está realizando te colocará la mama que hay que analizar entre dos placas plásticas. Estas placas tienen que presionar la mama para conseguir una imagen clara de su interior.

La mamografia se la clasifica dentro de una categoría de BI-RADS (Breast Imaging-Reporting and Data System), las primeras I y II son hallazgos benignas, la III es probablemente benigna, mientras la IV y V aumenta la probabilidad de que sean malignas. En muchas ocasiones la mamografía puede revelar lesiones malignas sin que estas se palpen clínicamente.

La capacidad de identificación de estas lesiones pequeñas ha preconizado la utilización de la mamografía para detectar tumores antes de que puedan ser palpables y clínicamente manifiestos (cribage mamográfico). Este diagnóstico, efectuado en una fase muy precoz de la enfermedad, suele asociarse a un mejor pronóstico de curación, así como a la necesidad de una menor agresividad del tratamiento para el control del cáncer.

En general se aconseja una mamografia anual a partir de los 40 años. Sin embargo, la edad de inicio, la frecuencia y la necesidad de estudios complementarios puede ajustarse en base al riesgo de cada paciente. Habla con tu médico que te aconsejará si es necesario la realización de una mamografía o no y qué beneficios e inconvenientes tiene este proceso en tu caso.


2 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page